...sigue de tu celular

y vernos ahora, en otro escenario, en otro tipo de relación. Me gusta este status, cómplices y culpables de nuestros actos. Actos sin causa ni consecuencia, sólo espontaneidades más que esporádicas, menos que esporádicas. Ya no hay para que repetirlo más. Acá nos quedamos y desde acá avanzamos. Gracias por venir.

Continúa en papel

Tú

Vista adelante sin palabras. Al lado lo que siempre soñé. Ahí, tan cerca y tan lejos. Lo que me hace feliz, pero sin risa en su rostro. Bella como siempre. Segura. Con la vista adelante sin palabras.
Dos meses después ahí estamos. Mirando el horizonte. Cada uno por separado, Pero al final se juntarán. Promesa. Porque para allá vamos los dos. No habrá llegadas por separado. Iremos juntos, quizás con la vista adelante, sin palabras. Pero ahí estaremos. Con el hombro puesto a su lado, soportando. Como me soportan a mil, como la soporto a diez.
Somos otros y lo sabemos. Somos más dos meses después.

Doble ví(d)a

Cruzó con decisión mientras parpadeaba el verde. El rojo irremediablemente iba a llegar. Y llegó. Por segundos interminables quedó ahí. Entre bocinas, motores, y la mirada fija a los ojos. Parada con los pies hundidos en asfalto. El segundo fue una hora. Terminaba de cruzar o volvía. La mitad es la mitad, hasta ahí quería llegar al menos. En verdad yo quería que llegará hasta ahí. Era su decisión. El segundo seguía siendo un segundo. Y el primero seguía siendo el primero. Volvió. Miró de reojo, pero volvió. Al otro lado se veía ya difusa. El rojo quedó perpetuo. Me dí toda la vuelta durante seis meses y volví. Seguía todo igual. "Van a dar verde", dijo el anciano. Él también quería cruzar. Más vale tarde que nunca.

Ella

Ya la había visto, dibujada. Desde sus mejillas hasta el detalle de su margarita. A trazo fino. Irisada en mis sueños. No tenía nombre…hasta ahora. Era ella. Pensé haberla tenido cerca muchas veces. Avancé creyendo encontrarla…la de los sueños. Pero no. Eran distintas. Les faltaba, les sobraba mucho.
La soñé, lo juro. Despierto y dormido. Alegre y triste. Ilusionado y decepcionado. Es ella, oculta atrás de su pelo. Liso, crespo, ondulado, da lo mismo. Eran sus ojos, su boca, sus labios...era su risa. Esa que no la he visto ni escuchado, pero que la conozco. Era la de las mariposas en el vientre y la de las piernas temblorosas. La de las ganas con miedo. La de las 4 de la mañana. Era la copia exacta, a trazo fino…irisada.

A Dios

Nunca vi la muerte tan de cerca. La mía la había deseado unas cuantas veces, la de otros, otro tanto más. Nunca vi la muerte tan de cerca, no quería verla tampoco. Definitivamente hay que dejar de creer en Dios, ya no hay nada más que hacer. Por un momento deseo ser él, como lo quiso el diablo también. Hacer algo con el supuesto poder y dejar de fomentar el ateísmo. Ser un poco más consecuente, aunque tampoco es mi virtud terrenal. Nunca vi la muerte tan de cerca. Podría haberla provocado en alguna noche de de alcohol. Tomando el volante con fuerza y envalentonándome. Bebiendo una botella más y no escribiría esto. Caminar solo de madrugada
sin esperar el maldito taxi. Desear y querer no son exactamente lo mismo en este cuento. La había deseado, pero simplemete no la quería. Y la de otros ni hablar. Hay que dejar de creer en Dios, aunque él se enoje.

Vida

Algún día la vida lo recibirá con los abrazos abiertos y hablará su idioma. Dejará atras esa mierda de pre-vida. Le dará un hombro y le explicará, crisis tras crisis, los porqué. Verán juntos por la ventana lo que hay allá afuera. La felicidad de aquella rubia y el séquito que la espía. Verán las drogas en la esquina, en el verdor o en la sala de ensayos. Tomarán juntos de la misma copa. Escupirán al mismo desgraciado y maldecirán el ego de la misma pelirroja. Irán a la fiesta que siempre quisieron ir con la ropa que nunca se atrevieron a poner. La vida se dará por fin cuenta lo que es vida. Gracias a él y sus miedos. Gracias a él y sus fracasos. Al desgraciado bañado en baba que no entiende razones. A las razones que no enienden a nadie. Ni siquiera se compran con el puto billete. Ni la labia de Mistral, ni la valentía de Prat ni la intelectualidad de Bello. Mierda simbólica que la vida comienza a despreciar. Es su propio destino. La vida se financia con las poesias de Mistral y ella lo comienza a entender. Será el primer acercamiento con la muerte. Ya no quiere seguir siendo lo que es.

Mala Junta

Todo el tiempo pérdido se convirtió así, con un chásquido de dedos, en tiempo ganado...y en muy buena lid. El azar y su obviedad se convitió por fin en azaroso. En el amanecer ideal, pero sin rocas ni arena. Sin miradas al cielo esperando algún paso fugaz, sin estrellas regaladas.Tiritando, culpando al frío que jamás fue frio...Piernas temblorosas que nada tenían que ver con la mala posición. Toallas con nuevas utilidades, un aro menos que no importaba. Palabras sueltas que nacian en tu boca y morían en la mía. Cuánta tentación acumulada luchando con las ganas. Hasta que un día no dio para más...La voluntad ha muerto

Sana

Con cuidado...avanzando entre vasos, colillas y tacos...Así llegué.Empezando al revés, como el cine de vanguardia. Olvidando tu nombre luego de un beso, pero tomando tu mano como si nos conocieramos desde siempre...Tus dedos sobre los míos, nuestras manos en tu vientre...Así empezó, al revés, conociéndonos ahora, semanas después, que tal vez sean meses...Tú allá, sola, libre pero retenida por algo que puede ser tan fuerte como las ganas...Las llamadas nocturnas que reemplazan tus sueños...las llamadas mañaneras que despiertan tus pesadillas.

Abrazo

Hoy necesité tu abrazo...un abrazo con algunas de las frases que hay en esa maldita bandeja de entrada y que a medida que se va llenando, siguen no siendo la prioridad para ser borrados...Necesitè ese abrazo que me dabas cuando te lo pedìa...Te pedìa sólo un abrazo...aún en el momento más crítico, aún cuando tenìa todos los argumentos para convencerte, aùn ahi, sólo te pedía un abrazo...un abrazo con hombro, sin asco, con lágrimas, con confort tirado al suelo...Era todo parte del abrazo...del abrazo que me diste y de todos los que no me has dado aún...No creo que vuelva a necesitar otro por estos días...puedes quedarte tranquila...nadie es imprescindible, tú lo dijiste...es aprendido.

Nano

Me cago en el desamor. En las borracheras con excusas, en los polvos sin sentido, en las noches con alargue, en los besos derrochados. Me cago en las caminatas temerarias, en las discusiones nocturnas, en la plata malgastada, en las canciones y su tristeza. Me cago en el orgullo barato, en el qué dirán, en lo que puede pasar. Miénteme como yo te mentí. Odiame como yo te odiaré. No hables mal porque yo no lo hablaré. No conozcas de más porque yo no conoceré. No caigas. El arrepentimiento duele más que el mismo dolor. Él vive sobreviviendo. No es lo que quiere vivir. Pero lo hará. Entre menos se tiene, menos se quiere. Lo que se quiso ya pasó. El pasado pasó. Pasó porque tú lo quisiste. Lo planificaste. No te atreviste. Viviste antes de tiempo. Tú y tus visiones futuristas catastróficas cargadas de pasados catastróficos. Tú y tus cambios. No te bancas lo que tienes. ¿Por qué no querer lo que se tiene? ¿Nada quiero o nada tengo? No, no tengo. No, no quiero.

Cambios

- ¿Acaso crees que podrías estar tanto tiempo con la misma persona...?

- Ojalá fueras siempre la misma persona...

Despedida

Empacó cuidadosamente para no dejar nada en la habitación, ninguna excusa para volver a verse. Finalmente ese dulce "Hola" se había convertido en el sin futuro "Adios" , tal como decía la canción que escuchaban juntos.

-Espera, se te quedan las ganas

-No, esas quédatelas tú. Te las dejo.

OLVIDO

No recuerdo en que momento pasamos del sillón a la cama

Y de la cama a la alfombra

Y de la alfombra a la cocina

Sólo recuerdo porqué volvimos de la cocina a la cama

Deducción

Tú y tu libreto de Clementine tan sigilosamente aprendido...

Disimular

-Yo estoy bien, mucho más tranquilo, ¿y tú?

-Yo mucho mejor



Sus vidas siguen siendo un un desastre

Trueque

Frío por calor. Otoño por verano. Santiago por playa. El trueque no era conveniente, pero había que aceptarlo. Sentía que me estaban metiendo la mano en el bolsillo, pero ya nada se podía hacer. Tres meses atrás el cambio lo había hecho yo. Ahora no podía reclamar. Acepté, no quedaba otra. Se lo llevó todo. Las caminatas, las puestas de sol y a ella. Sí, también a ella. No estaba en el primer trato, pero se incluyó en el segundo. No me dejó absolutamente nada. Sólo recuerdos. Le pedí que los llevara, pero no quiso. Ni él podía con ellos.

Nunca

Cuántas veces caminé pausado, sabiendo que iba una hora tarde, pero convencido de que iba a estar ahí. Sentada en su cama, esperándome, armando un collar con las piezas que había comprado en algún local chino que invadía mi Santiago. Ella también invadía mi ciudad, me invadía a mí. Con su pelo que cambiaba tal como cambiaba lo que yo sentía. La cartas nunca las escribí, las flores nunca las mandé. Su música sólo la acepté cuando ya no podía escucharla a ella. Era lo que quedaba, eran meses compilados en grupos anglos con nombres raros que inspiraban mi música. Era el italiano que canta en español, era la música de un power point, era su vida delante de la mía, por un tiempo, nuestra vida. Nunca cantamos juntos, ni siquiera lo intentamos. Nunca intenté nada. Me quedé. Sabía quen iba a estar sentada en su cama armando algún collar casero.

¿Ves?, no eres la primera

No eres la primera que me lo dice. Tampoco serás la última. Hubiera querido que fueras la última pero siempre supe que no sería así. La próxima lo volverá a decir. Para allá llevaré la conversación.

La primera, siempre.

Sus ojos son los inconfundibles. Su voz sólo la identifico yo.
-¿Alo?
-Alo, Nano
-Sí, con él
-¿Sabes con quién hablas?
-Uuh, eres tú, hace tres años que no hablamos
-¿Me llamas a la casa?


Hablamos dos horas. Siempre se vuelve o se intenta volver. Será la primera, siempre.

La primera vez

Cinco meses duró. Acepté la invitación con la ingenuidad que había pérdido hacía ya varios años. Terminé el trabajo, me vestí con lo primero que saqué del closet, corrí al metro. Todo rápido, todo apurado.
¡Tómate tu tiempo, Nano!, decía mi madre.

DELINEADOR / CARAMELOS DE CIANURO

Ahora soy yo quien te dejo
Eso nos va a dejar parejos por una vez más
No es necesario hacer un drama
En la frontera de la cama
Pues ya sabemos terminar

Hay una fuente que nunca se agota
Cuando me mientes de tus ojos brotan
Lágrimas de delineador
El silencio suele ser mejor

Como tormenta que nunca se acaba
Como violenta lluvia de lava
Deja salir tu dolor
Libéralo de tu interior

No entiendo como no se pudo...
Sólo entre sábanas desnudos
Nos llevábamos bien

No nos pudimos entender
No lo pudimos vencer
No sé si es que nunca estuvo allí
O si la magia se fue
No sé

Hay una fuente que nunca se agota
Cuando me mientes de tus ojos brotan
Lágrimas de delineador
El silencio suele ser mejor

Como tormenta que nunca se acaba
Como violenta lluvia de lava
Deja salir tu dolor
Libéralo de tu interior

Y si te vas... déjame atrás...
Que no pueda hacerte daño nunca más

Hay una fuente que nunca se agota
Cuando me mientes de tus ojos brotan
Lágrimas de delineador
El silencio suele ser mejor

Como tormenta que nunca se acaba
Como violenta lluvia de lava
Dejas salir tu dolor
Libéralo de tu interior

Y si te vas... déjame atrás...